Un nuevo FIFTY FATHOMS

Un gran abismo. No existe otra manera de describir la diferencia entre las categorías de relojes deportivos. ¿Qué características deberían tener los relojes deportivos? Algunas firmas relojeras ofrecen atributos de Alta Relojería, con movimientos de sofisticada construcción que incluyen volantes-espiral con tornillos de regulación, acabados esmerados, esferas y agujas bellamente torneadas, además de cajas relucientes. Todos estos son elementos de prestigio, por supuesto, pero carecen de las cualidades deportivas fundamentales: una construcción robusta, una reserva de marcha larga, resistencia magnética y alto rendimiento. Otras firmas, en cambio, sí anuncian robustez y otras características asociadas a la práctica del deporte, pero se quedan cortas en cuanto a los acabados del movimiento, el refinamiento de la esfera y la caja, y la elegancia en general. Estamos ante dos mundos diferentes que pretenden ser la misma cosa.

¿Existe algún reloj que supere esta evidente división? ¿Un reloj deportivo que ofrezca la sofisticación y el refinamiento de la Alta Relojería y que, al mismo tiempo, no transija en su misión de ofrecer un verdadero rendimiento deportivo?

Ese es, justamente, el caso del Fifty Fathoms, especialmente en su versión actual de 42 mm. Desde 2007, cuando el Fifty Fathoms moderno hizo su debut formal, el diámetro siempre fue de 45 mm en todos los modelos. El nuevo tamaño de 42 mm para la referencia 5010 ofrece una alternativa más pequeña que no sacrifica un ápice de su rendimiento como reloj de buceo.

Examinemos primero sus credenciales deportivas. El Fifty Fathoms original nació después de que el entonces director general de Blancpain, Jean-Jacques Fiechter, que era un apasionado del buceo, se quedara sin aire durante una inmersión en la costa sur de Francia. Solo gracias a un ascenso de emergencia pudo salvar su vida. Lo que siguió fue la revelación de que los buceadores necesitaban un instrumento de cronometraje, que llevó al diseño de un reloj que respondía plenamente a estas nece- sidades, resultado de una brillante creatividad y de su experiencia submarina. El Fifty Fathoms que creó fue la materialización de sus fuentes de inspiración y de una serie de invenciones patentadas. Hay que tener en cuenta que esencialmente todos los diseños relojeros básicos que conocemos hoy en día tuvieron su origen hace 200 años en los relojes de bolsillo. Todas las pautas eran bien conocidas. Sin embargo, este no fue el caso de los relojes de buceo. No había precedentes que guiaran a Fiechter. Primero tuvo que imaginarse los potenciales problemas y luego buscarles solución. Su perspicacia y su visión fueron tan profundas que los diseños básicos del Fifty Fathoms llegaron a definir los relojes de buceo para todo el mundo de la relojería de la época y siguen teniendo plena vigencia hoy en día: un bisel giratorio para el cronometraje de la inmersión protegido contra la rotación involuntaria; juntas eficaces para la resistencia al agua; números grandes y brillantes sobre un fondo oscuro para facilitar la legibilidad bajo el agua; un robusto movimiento de carga automática; y protección contra el magnetismo.

Estas características y funciones se encuentran en toda la gama Fifty Fathoms y, por supuesto, en el nuevo Fifty Fathoms de 42 mm. En sus 70 años de vida, este icónico reloj ha ido experimentando ciertos cambios transformadores, pero ha mantenido intactos los conceptos básicos y el estilo del original. El bisel giratorio es ahora unidireccional, de modo que no puede girar en una dirección que engañe al buzo, haciéndole creer que ha estado bajo el agua menos tiempo del que lleva realmente sumergido. Dicho bisel es de zafiro, el segundo material más duro después del diamante y, por lo tanto, es resistente a los arañazos, una virtud importante para el uso en el rudo entorno del buceo. Mientras que el modelo de la década de los 50 protegía la espiral metálica —el componente más vulnerable— del magnetismo encerrando el movimiento en una caja interna de hierro dulce, el 5010 tiene una espiral de silicio que es esencialmente amagnética. Con el fin de ofrecer una resistencia superior a los cambios de marcha causados por los golpes, el 5010, al igual que todos los movimientos Blancpain modernos, dispone de una regulación inercial controlada por tornillos de regulación de oro que, a diferencia de los sistemas antiguos y menos caros de regulación de raqueta, no cambian de posición con un uso enérgico, garantizando así un cronometraje estable.

Una larga reserva de marcha es también esencial para un reloj deportivo de alto rendimiento. El 5010 se basa en el calibre 1315 de Blancpain. Está dotado de tres barriletes dispuestos en serie que proporcionan una reserva de marcha de 5 días. Es muy importante destacar que los tres barriletes se han diseñado con muelles reales de distintas resistencias para equilibrar el par distribuido al escape y al volante. El resultado optimiza el funcionamiento del reloj en diferentes estados de cuerda (completa o casi desarmada).

El enfoque deportivo del 5010 no ha pasado por alto las correas y el brazalete. Se ofrecen cuatro opciones: una correa NATO fabricada a partir de redes de pesca recicladas; una correa tropical de caucho; una correa de tela de vela; y, por último, un brazalete de titanio (hablaremos de este material más adelante). Las cuatro son aptas para el uso bajo el agua.

Veamos ahora cómo ha influido la Alta Relojería en la personalidad del 5010, empezando por el movimiento. El refinamiento de los acabados es el marchamo de la relojería de prestigio. El calibre 1315 del 5010 rezuma sofisticación gracias a los relucientes achaflanados cuidadosamente realizados, los rubíes extragrandes incorporados en molduras finamente pulidas, un acabado soleado ejecutado a la perfección en las superficies planas de los puentes, una masa oscilante de oro macizo que luce las firmas «Blancpain» y «Fifty Fathoms» en relieve y un revestimiento NAC en contraste en la parte inferior, sin olvidar, entre otros, el acabado acaracolado aplicado al tren de ruedas. Gracias a la resistencia magnética de la espiral de silicio, que hace innecesario el uso de una caja interna de hierro, el 5010 está equipado con un fondo transparente que permite admirar el movimiento. Más allá de la resistencia al magnetismo, la espiral de silicio aporta un nivel adicional de refinamiento al movimiento. El silicio es más ligero que las espirales metálicas tradicionales, lo que mejora la cronometría del reloj en circunstancias en las que se producen cambios en su posición vertical, ya que el menor peso reduce los efectos de la gravedad sobre la marcha. Además, la respuesta del silicio a los cambios en la fuerza del muelle real a medida que el barrilete se desenrolla es más uniforme que la de los metales alternativos, lo que mejora una vez más la cronometría.

Se ofrecen dos opciones de esfera, una negra y otra azul. Ambas tienen una superficie delicadamente estructurada, índices tridimensionales, cifras arábigas a las 12, 3, 6 y 9 horas y triángulos cada cinco minutos, cada uno con un borde esculpido. En la versión de titanio, el borde es de oro blanco; en la versión de oro, de oro rojo. La ventanilla de la fecha situada a la altura de las 4:30 horas satisface las necesidades del uso diario.

Además de ofrecer una alternativa de menor tamaño a su predecesor, el 5010 aporta nuevas opciones de materiales y colores para el conocedor de Blancpain. En los últimos años, la firma ha ido ampliando su oferta de relojes deportivos de titanio, sobre todo con los recientes Bathyscaphes, el Act 2 Tech Gombessa, el X Fathoms, el 500 Fathoms y un modelo del 5015. Esta progresión se ha acelerado hasta convertirse en la corriente principal, de modo que el titanio grado 23 se ha consolidado como una de las dos opciones de material para la caja del 5010. El titanio grado 23 se basa en el titanio grado 5. Algunos lo denominan directamente «grado 5» y se refieren a él como «grado médico», ya que sus propiedades no alergénicas lo convierten en el mejor para aplicaciones médicas como las prótesis articulares. El grado 23, denominado Extra Low Inclusions (ELI), se sitúa por encima del grado 5. La diferencia es la pureza: la del grado 23 es superior al tener un porcentaje reducido de oxígeno. La reducción de la cantidad de oxígeno mejora la solidez del metal. Se convierte así en la primera opción por su mayor robustez, ligereza, resistencia a la corrosión y dureza.

Este rendimiento mejorado es lo que llevó a Blancpain a seleccionar el grado 23 para el 5010. Se puede debatir si la caja de titanio de grado 23 habla más del aspecto deportivo de la personalidad del 5010 o del que tiene que ver con la Alta Relojería. Su solidez, ligereza y resistencia a la corrosión son puntos a favor de la deportividad. Sus acabados sofisticados —como la nítida unión artesanal entre las asas y la caja— inclinan la balanza a favor de la Alta Relojería. El titanio grado 23 también es el material elegido para el brazalete metálico, cuyos eslabones se han acabado a mano uno a uno. Ahora existen nada menos que ocho variantes diferentes de modelos de titanio en la línea 5010: esfera azul con correas de tela de vela, tropicales o NATO, o bien brazalete de titanio; y esfera negra con las mismas cuatro opciones de correa o brazalete.

Los modelos 5010 de oro rojo son más deportivos y elegantes. Existen dos versiones: oro rojo con esfera y bisel negros, y oro rojo con esfera y bisel azules.

Cuando en la década de los 50 se creó el Fifty Fathoms como instrumento de buceo, el compromiso con esta misión fue total. Del mismo modo, los Fifty Fathoms modernos se han concebido con el compromiso absoluto de ser tanto compañeros de buceo como ejemplos de Alta Relojería sofisticada y elegante para el uso diario.